Mallorca es el claro ejemplo de un lugar 100% mediterráneo; calas de aguas cristalinas, cuevas recónditas, atardeceres espectaculares, pueblos con encanto… Siendo la isla más grande y completa de las Baleares, ofrece un paisaje que combina la belleza de la sierra y la costa. 

 Palma de Mallorca: como capital insular y ciudad más grande de todo el archipiélago, alberga impresionantes tesoros:

• Catedral de Palma: impresionante construcción situada a la orilla de la bahía de Palma. Fue declarada Monumento Histórico- Artístico y su rosetón es el más grande del mundo dentro del estilo gótico.

• Castillo de Bellver: construido con la finalidad de servir de residencia para el rey Jaime II de Mallorca, permite contemplar unas vistas espectaculares de la bahía de Palma y del entorno natural que rodea la fortificación.
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• Palacio de la Almudaina: situado en un enclave estratégico junto al mar, es la residencia oficial de la Familia Real Española durante sus estancias en Mallorca. Sin embargo, algunas de sus zonas están abiertas al público y representan a la perfección la historia de la ciudad.
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• Museu del Baluard: Es Baluard Museu d’Art Modern i Contemporani de Palma es un espacio dedicado a la cultura con la finalidad de difundir el arte balear y mediterráneo. Además de la función patrimonial del interior del museo, los espacios exteriores se integran a la perfección como parte del recinto cultural.

• Sierra de Tramuntana: área montañosa más importante del archipiélago balear, considerada como Patrimonio Mundial de la Unesco. Con grandes zonas boscosas e impresionantes acantilados que caen en picado al Mar Mediterráneo, es pura naturaleza y tranquilidad.

Uno de los rincones más pintorescos de este paraje es el pueblo de Deià, donde se pueden contemplar preciosas calles empedradas, una espesa vegetación, playas paradisíacas y recorridos en los que  conectar con la naturaleza.

Otra de las paradas obligatorias es el pueblo de Valldemossa, donde se esconde la Cartuja de Valldemossa, uno de los lugares más visitados de la isla junto a la Catedral de Palma. Situado a 400 metros de altura, este palacio fue un regalo del rey Martín I el Humano a los monjes cartujos. 

Por último, cabe destacar la tradicional finca mallorquina Son Marroig. Actualmente, es un museo dedicado al archiduque Luis Salvador de Austria, quien estuvo viviendo en la residencia, completamente enamorado del enclave en el que se encuentra ubicada. 

• Ermita de Betlem: ubicada en una de las zonas más tranquilas y alejadas del bullicio de la isla, esta ermita fue construida por una comunidad religiosa con la finalidad de actuar como residencia para ermitaños y monjes. A día de hoy, sigue manteniendo el tradicional eremitismo mallorquín y permite contemplar una inolvidable panorámica de la bahía de Alcudia.
  
  

• Castell de Capdepera: declarado como Bien de Interés Cultural gracias a su estado de conservación, se trata de una fortificación que fue construida para proteger al pueblo en una época donde tenían lugar frecuentes ataques piratas. El castillo esconde el Museo de la Llata, con la finalidad de mostrar las herramientas tradicionales imprescindibles a la hora de elaborar productos y artículos artesanos.
  
  

• Artà:  se trata de un pueblo totalmente arraigado a sus orígenes, el mayor atractivo turístico del cual es la Iglesia Parroquial. Este paraje alberga un rico patrimonio cultural, reflejado sobre todo en el Santuari de Sant Salvador.
  
  

• Santuari Lluc: considerado como un enclave religioso y cultural, es uno de los lugares más visitados de la isla, tanto por residentes como por turistas. Es uno de los puntos de partida preferidos por los aficionados al senderismo, además de ofrecer parques de juegos para los más pequeños en el caso de visitar el Santuario en familia, y de albergar en su interior una gran variedad de servicios, desde un museo hasta un jardín botánico.
  
  

• Museo Etnològic de Muro: esta exposición muestra las diferentes herramientas tradicionales empleadas en el campo, una colección de cerámica tradicional y una antigua farmacia, todo ello diferenciado en varias salas.
  
  

• Talaiot escalonado de Pula: el campo de golf de Pula Golf Resort alberga una joya histórica, un talaiot escalonado de gran tamaño. Muestra indicios de existir desde la época del bronce antiguo y, en su interior, escondía una habitación adosada y un juego de vasos y utensilios de cerámica.